COME EN FAMILIA

Bienvenidos a “Come en familia”, uno de nuestros diez hábitos saludables, que busca promover la unión familiar y el adecuado desarrollo de todos los niños y niñas.

Sabías que en México la comida, suele ser un momento clave, se ha convertido en el instante perfecto para reunir a todos o casi todos los miembros que integran a una misma familia y constituye una actividad fundamental para promover encuentros y conocer la vida diaria de sus miembros, además se sabe que es vital para fortalecer la unidad y cohesión familiar. Es más, algunos de los estudios científicos, sobre este tema, avalan que comer en familia con frecuencia brinda importantes beneficios para la salud, incluso influye en la calidad de la dieta y la calidad de vida de cada uno de los integrantes.

Actualmente sabemos que comer en familia, se ha convertido en un pilar y un factor determinante, influye en la prevención de algunos problemas de salud, alimentación, trastornos de conducta y comportamiento alimentario. En este sentido, Nestlé por Niños Saludables busca fomentar la práctica de comer en familia, por lo cual en este sitio te brindamos y ayudamos a encontrar acciones específicas a fin de incrementar la frecuencia con la que comes en familia y acompañarla de otros hábitos que buscan, sobre todo, mejorar la calidad, así como los tipos de alimentos servidos, tamaño de las porciones, ambiente de las comidas familiares

Hemos trabajado en conjunto con un equipo multidisciplinario para desarrollar ideas saludables e información, como herramientas que buscan promover que los niños y las niñas puedan comer en familia y así fomentar el adecuado desarrollo de su identidad, aprender y conocer su herencia cultural, étnica y religiosa. Cuando los niños participan en estas comidas familiares comienzan a aprender más sobre su herencia e historia familiar. Sabemos que este tipo de reuniones generan un impacto positivo en el desarrollo intelectual de los niños y niñas, y que además promueven la adquisición de vocabulario de los más pequeños, las comidas familiares proporcionan mayor seguridad emocional, autoestima y sensación de control sobre sus vidas.

Comer en familia constituye la base para que los niños y niñas puedan elaborar recuerdos, incluidos recuerdos de alimentación que se forman en la infancia y que perduran a lo largo de la vida, recogiendo las experiencias sensoriales que intervienen en la alimentación (tacto, gusto, olfato, oído y vista).

Las comidas familiares (frecuencia, lugar, orden, estructura) juegan un importante papel en la instauración y promoción de una alimentación saludable, ya que los hábitos alimenticios se construyen en los primeros años de vida, en los cuales tienen un papel esencial el comportamiento y las prácticas alimenticias que tienen en la familia, principalmente la de los padres. Los padres tienen un papel decisivo, por tanto, en la educación de los más pequeños de la casa para que adquieran hábitos alimenticios adecuados, y se mantengan a lo largo de la vida de estos o, al menos, disminuyan los posibles efectos o costumbres negativos impuestos por el ambiente, el entorno alimentario y social en el que se desenvuelven los niños.